¿Topografía con drones?

Cada día es más común encontrar start-ups en internet que ofertan el servicio de topografía con drones en todos sus colores y variantes. De igual manera es súper común  toparse con técnicos ortodoxos que claman por las cabezas de aquellos que diluyen la calidad técnica de un levantamiento ofertando soluciones que no existen. Es pensando en esta confusión del internet que a través de la presente entrada se despejarán las dudas sobre la nueva, y por muchos invalidada, topografía con drones.

¿Un error de concepto?

Comencemos con definir topografía.  Topografía es una palabra que etimológicamente proviene de los términos griegos topos, que significa lugar o territorio y grafia que significa escritura o tratado; por lo que se puede definir a la topografía como la descripción escrita o dibujada de un lugar.

Ahora bien, la topografía como técnica o ciencia es aquella que reúne los principios y procedimientos que tienen por objeto describir y/o representar gráficamente pequeñas extensiones de la superficie terrestre (para grandes extensiones existen ciencias como la geodesia).

Por otro lado la fotogrametría se puede definir como el conjunto de técnicas que permiten realizar mediciones sobre fotografías. Es importante mencionar que si bien algunos autores definen a la fotogrametría como una ciencia, e incluso un arte, este autor considera que el término técnica es más apropiado.

La fotogrametría se ha empleado para diversos fines, que van desde el mapeo de grandes extensiones de terreno hasta mediciones milimétricas de artefactos y colecciones en museos. En materia del estudio del terreno, se emplea para mapear grandes extensiones territoriales y es mucho más cercana a ciencias como la geodesia.

Históricamente ambas técnicas reposaban en su muy particular nicho, hasta la llegada de los drones.

Campos de acción distintos

Tradicionalmente, la topografía se emplea para caracterizar terrenos pequeños en un sistema plano donde no se consideran las deformaciones ni irregularidades de la forma terrestre con un máximo de precisión. De esa manera la fotogrametría se restringe a grandes extensiones territoriales, donde es viable sacrificar la precisión (un método directo) por celeridad y economía (método indirecto).

Si bien existen excepciones donde se tienen que considerar metodologías mixtas -como tramos carreteros o grandes parques eólicos- donde se tienen que realizar levantamientos topográficos de método directo considerando correcciones geodésicas, se tiene una clara línea que determina que método es el adecuado para cada tipo de proyecto.

Los drones llegaron a cambiar el paradigma. Permiten aerotransportar cámaras y realizan planes de vuelo con precisión de navegador GPS, lo que genera reconstrucciones tridimensionales del terreno (similares a maquetas). Si a estas maquetas se agregan puntos de control terrestre de muy alta precisión, se obtienen maquetas a una resolución envidiada por la fotogrametría tradicional.

Y a todo esto, ¿Existe la topografía con drones?

¿Es correcto ofertar una reconstrucción fotogramétrica con drones como levantamiento topográfico?

No comercialmente. Arquitectos, Ingenieros y Diseñadores de proyecto generalmente buscan un levantamiento topográfico de una gran precisión; misma que solo puede obtenerse empleando equipo especializado y que no puede igualarse empleando drones. Un levantamiento realizado con drones tendrá una menor precisión y deberá de considerarse como tal, por lo que es importante notificar al cliente de las limitantes y capacidades de estos métodos.

Si en un sentido estricto. El resultado de una reconstrucción fotogramétrica puede plasmarse en planos CAD así como dibujar la planimetría y/o la altimetría del terreno. Los levantamientos con vehículos aéreos no tripulados son una gran alternativa para describir terrenos de gran magnitud.

Entonces ¿Que papel juegan los drones en la topografía?

Así como la fotogrametría se oferta como una gran solución para levantamientos de grandes extensiones territoriales, la reconstrucción tridimensional empleando drones se ha ganado de un espacio en las técnicas de prospección; y si bien, sus productos son valiosos, no debe de perderse de vista la finalidad de los resultados para garantizar su utilidad y pertinencia.